tubos de centrífuga de laboratorio, fabricados en polipropileno (PP), son instrumentos esenciales en la investigación de laboratorio, ya que permiten la separación, el almacenamiento y el análisis efectivos de las muestras.
Material de polipropileno:
tubos eppendorf se fabrican principalmente con polipropileno (PP), un material versátil y robusto muy apreciado en entornos de laboratorio. El PP ofrece una resistencia química excepcional, lo que lo hace compatible con una amplia gama de reactivos y disolventes. Sus propiedades de baja unión a proteínas ayudan a preservar la integridad de las muestras, lo que garantiza resultados precisos y fiables. Además, la durabilidad y la resistencia a la deformación del PP garantizan la manipulación segura de las muestras durante la centrifugación a alta velocidad.
Amplia gama de tamaños:
Los tubos de centrífuga están disponibles en varios tamaños para adaptarse a las diferentes necesidades experimentales. De tubos de microcentrífuga (0,2 ml a 2 ml) a tubos cónicos más grandes (hasta 50 ml), los investigadores pueden seleccionar el tamaño óptimo según el volumen de la muestra y los requisitos experimentales. Esta amplia gama garantiza flexibilidad y se adapta a diversas aplicaciones de investigación, desde biología molecular hasta diagnóstico clínico y más.
Rendimiento de sellado superior:
Los tubos de centrífuga están diseñados con una atención meticulosa al rendimiento del sellado, protegiendo las muestras durante la centrifugación, el almacenamiento y el transporte. Los tapones de rosca integrados en los tubos de centrífuga proporcionan un sellado seguro ya prueba de fugas. Esto evita la evaporación, la contaminación cruzada y la pérdida de muestras debido a un mal manejo. El sello confiable asegura la integridad de la muestra, lo que lleva a resultados precisos y consistentes.
Amplio rango de tolerancia a la temperatura:
Los tubos de centrífuga están diseñados para soportar un amplio rango de temperatura, lo que los convierte en herramientas versátiles para una variedad de procedimientos de laboratorio. El material PP utilizado en su construcción garantiza su resiliencia en temperaturas extremas, incluidas las condiciones criogénicas y las aplicaciones de alta temperatura. Esta amplia tolerancia a la temperatura permite a los investigadores realizar una variedad de técnicas, como centrifugación, reacciones inducidas por calor y crioconservación, sin preocuparse por la integridad del tubo o la estabilidad de la muestra.