Introducción de criotubos
May 30, 2023
Los tubos criogénicos, también conocidos como tubos criogénicos, son contenedores especialmente diseñados que se utilizan para almacenar materiales biológicos a temperaturas muy bajas, que suelen oscilar entre -80 °C y -196 °C. Se utilizan comúnmente en laboratorios, instalaciones de investigación médica y otros entornos científicos donde las muestras biológicas, como células, tejidos y ADN, deben almacenarse para su uso o análisis en el futuro.
Los criotubos vienen en varias formas y tamaños, según el uso previsto y la cantidad de material biológico que necesitan contener. Los tipos más comunes de criotubos son el formato de vial estándar, que puede contener hasta 2 ml de muestra, y el microformato, que puede contener hasta 1,5 ml de muestra. Otras variaciones incluyen tubos criogénicos con tapones de rosca, tapones a presión o tapones a presión, según las preferencias del usuario.
Una de las especificaciones más importantes de los criotubos es su composición material. Deben estar hechos de materiales duraderos y químicamente inertes, así como capaces de soportar temperaturas extremas. Los materiales más utilizados para los criotubos son los plásticos de grado médico, como el polipropileno y el policarbonato, que son resistentes a la tensión mecánica, los productos químicos y los cambios de temperatura.
Otra especificación importante para los tubos criogénicos es su capacidad para mantener un sello hermético. Esto ayuda a prevenir la contaminación de las muestras biológicas y asegura su integridad durante largos períodos de tiempo. Los criotubos con tapones de rosca o tapones a presión suelen preferirse a los tapones a presión, ya que proporcionan un sellado más seguro.
Los tubos criogénicos también deben ser capaces de soportar cambios rápidos de temperatura durante el almacenamiento o el transporte. Esto se logra mediante el uso de materiales aislantes especializados, como espuma o aire comprimido, que ayudan a mantener una temperatura constante dentro del tubo, incluso en caso de cambios repentinos en la temperatura ambiente.
Por último, los tubos criogénicos deben estar claramente etiquetados y ser fácilmente identificables para garantizar que se utiliza la muestra correcta con fines clínicos o de investigación. Muchos tubos criogénicos están marcados con identificadores únicos, como códigos de barras o códigos QR, que se pueden escanear para acceder a información sobre la muestra, incluido su origen, condiciones e historial de análisis.
En conclusión, los tubos criogénicos son herramientas esenciales para la investigación biológica y el diagnóstico médico, ya que permiten a los científicos y médicos almacenar y conservar valiosos materiales biológicos para su uso futuro. Al seleccionar tubos criogénicos, es importante tener en cuenta la composición del material, la calidad del sellado, las propiedades aislantes y las opciones de etiquetado para asegurarse de que cumplan con los requisitos específicos de su laboratorio o instalación.